Con estas temperaturas veraniegas, uno recuerda que pronto será momento de enfundarse en la bikini y salir a pasear los jamones. ¿Qué malla comprarse? Aquí una idea verdaderamente original…
Este novio (muy valiente él) decidió jugarle una broma extremadamente pesada a su novia, descartando sus habituales bikinis, y colocando en su lugar una malla enteriza que lleva su cara. No conforme con semejante diseño, el muchacho pidió también una parte trasera… que también se correspondía con su propia parte trasera (un poquito peluda, por cierto).
Finalmente, la novia aceptó el reto de lucir la bikini en la playa, sorprendiendo a todos los bañistas que no dejaban de observarla, estudiando la peculiar malla, probablemente tratando de entender si la cara del frente era efectivamente la del hombre que acompañaba a la pobre muchacha.
Y si te sentís escandalizado por este diseño, recordemos que hay gente que se pone las tétricas Face Bikinis…
La playa puede ser un lugar muy extraño, sin dudas…